lunes, 8 de septiembre de 2008

¿COMO ES TU IGLESIA?

Se dice que hay cuatro clases de iglesias: una iglesias que se parece a un cementerio, otra que se parece a un museo, una que se parece a un teatro y otra que se parece a un festín.
La iglesia que se parece a un cementerio es donde las personas perdieron la alegría, porque la actividad cristiana está casi muerta, se les dice así a las iglesias en donde la gente va y viene sólo por obligación como si fueran a visitar a algún antepasado.
La iglesia que se parece a un museo es donde la gente se alegra diciendo "Antes nuestra iglesia era así!", recordando los tiempos pasados como si estuvieran viendo antiguedades en un museo.
la que sigue es la iglesia que se parece a un teatro. La gente va sólo para ver y aplaudir a las estrellas o cantantes y pagan algo de dinero antes de salir. Hay sólo algunos protagonistas y directores, la mayoría son espectadores.
Por último, está la iglesia que se parece a un festín; los creyentes salen a la calle para celebrar la venida de Jesús e invitan a los pobres y enfermos para compartir a Cristo quien vino a salvarnos. El festín se llena por esas personas. Los que conocieron a Jesús sirven con alegría y se sienten satisfechos aún sin comer. Y Jesús también se alegra de verlos.

Una verdadera iglesia debe ser como un festín. Deben reunirse aquellos que desconocen a Dios, enriquecerse con la Palabra, alegrarse con la alabanza y llorar por la gracia de Dios. Oro para que las iglesias de nuestra nación sean así.

¿Y tu iglesia....cómo es?


-(La iglesia es la única esperanza) Hong Sung-uk
Time with God, september 2008

jueves, 4 de septiembre de 2008

TODAS LAS COSAS AYUDAN A BIEN????

La Biblia nos enseña que a los que aman a Dios todas las cosas los ayudan a bien. Pero ¿de qué manera podría ayudar a bien al cristiano atravesar problemas o situaciones difíciles? Le he hecho esta pregunta a Dios un millón de veces...
Esta mañana, mientas me encontraba sentada en mi escritorio, dos personas comentaban muy animadamente acerca de algo de lo cual no entendía ni un comino. Entonces pensé, “ que pena, no puedo escuchar” (El chisme tiene la razón! .....jajaja). Pero luego reaccioné “las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres” – fue lo que vino a mi corazón y me sorprendí.
El hecho de enfrentar una discapacidad ha puesto en una perspectiva muy diferente la aplicación de la Palabra de Dios en mi vida. Quizá la mayoría de la gente “normal” se preguntará ¿en qué te puede beneficiar ser SORDA? Bueno, Dios me ha ido enseñando que la verdad expresada que “A LOS QUE AMAN A DIOS TODAS LAS COSAS LOS AYUDAN A BIEN” es una realidad para TODOS.
La gran mayoría de la gente no entiende esta verdad, es casi seguro que los todos cristianos conocemos este versículo pero no llegamos a comprenderlo totalmente. Generalmente lo asociamos a la prosperidad material.
Ver el vaso “medio lleno o medio vacío” es algo que he aprendido a no poner en práctica en mi vida, porque con CRISTO ESTAMOS COMPLETOS!!! Ni medio lleno ni medio vacío, completos.
Para mantener una actitud positiva hay que ser Cristocéntricos; vivir con la esperanza puesta en El, obligatoriamente te hace ver la vida positivamente, siempre hay un mañana mejor en Cristo, todo lo que sucede aquí es temporal y nuestra morada con Cristo es ETERNA.

Ahora bien, muchas veces la gente se dirige a mí y me dice que no debo decir que soy sorda, que Dios ya me sanó, que declare mi sanidad y cosas por el estilo. Yo me limito a sonreír y agradecer sus palabras, instándoles a que oren por mí, entiendo lo que quieren decir (please, no se ofendan!). La verdad es que uno no puede admitir que vive feliz, a pesar de las circunstancias , aunque por ningún motivo ese gozo se traduce en conformismo (el muy clásico “ya pues, que más dá”) no hay forma de explicarlo, no me entienden y como Kiko, “pues me doy”, porque si tienes un problema y sigues feliz entonces o eres un cristiano frío o eres un conformista o un incrédulo, o no tienes fe, no oras (osea, que fea tu actitud oye).

Pero he llegado a comprender en estos últimos años, que hay cosas que humanamente no me corresponden (Gracias a Dios!) y que no puedo hacer por mi misma (es decir, adiós frustración). Jesús lo explicó tan sabiamente: por mas que le ponga empeño no puedo hacer que se agreguen centímetros a mi estatura; lo que está en la potestad de Dios le compete solamente a El y eso no significa que uno es “conformista”... Dios es Soberano. Sólo El puede obrar milagros, yo no, ni MI oración, ni MI fe. Aunque me arrodille sobre chapitas o me pase 1000 días en ayuno, yo no tengo ni tendré el poder de obrar milagros, únicamente lo tiene Dios (nuevamente GRACIAS A DIOS). Así que mejor no nos quedemos con el mérito que solo le corresponde a Dios, no es mi fe, no es por mi oración, ES POR LA GRACIA Y SOBERANIA DE DIOS.

Otra verdad es que hay que vivir agradecidos por cada cosa que Dios nos da, aún por las circunstancias más oscuras por las que pasamos y sobretodo aprender a no quejarnos porque entonces, podremos ver el camino que Dios nos ha trazado y si no lo vemos, pues sencillamente tendremos que aprender a caminar alumbrándonos únicamente con la Palabra de Dios (Lámpara es a mis pies tu Palabra y lumbrera a mi camino...). Significa que ya no confío en mis habilidades, en lo que puedo lograr con mi educación, en mi coeficiente intelectual, en mis contactos, en mis amistades, en mi percepción, únicamente puedo CONFIAR EN DIOS. Es tan sencillo y a la vez tan complicado!! Porque nos crían para ser independientes, porque somos egocéntricos.... Por ejemplo, cuando no tenía esta discapacidad me sentía confiada en mi experiencia, en mi habilidad, en mis estudios, en mi excelente curriculum, en mi sueldo para cubrir mis necesidades y aplicar la CONFIANZA en Dios era un mero decir, un cliché, una frase, un versículo aprendido de memoria. Pero que diferente es vivir verdaderamente CONFIANDO en Dios!!! ¿Cómo podría darle gracias por no poder escuchar? Bien fácil, for example (manya con mi spanglish) le doy gracias por...
- No escuchar conversaciones que no me corresponden ni me edifican.
- No participar de chismes, ni rajes, ni cotilleos (es decir, el chisme NO tiene la razón) por tanto no me entero de cosas que podrían dañar el concepto que tengo de alguna persona o lugar y que además podrían generar sentimientos negativos.
- Por poder concentrarme más ya que ningún ruido externo me distrae.
- Por no perder el tiempo en el teléfono (mas que lo muy indispensable) no pierdo el tiempo hablando por celular, ni recibo llamadas de amigos o amigas durante las horas de trabajo.
- Por no escuchar los comentarios negativos hacia mi persona, ya sea por razón de creencias, físico o por mi discapacidad.
- Por escuchar lo verdaderamente importante, ya que le presto toda mi atención a la persona que trata de comunicarse conmigo.
- Por aprender a ser paciente y tolerante no solo con los demás sino también conmigo.
- Por que en el silencio puedo tener largas conversaciones con Dios.

Y así la lista podría seguir... dejar de escribir la lista negativa y me dedicarse solo a la positiva, aprendí que es una decisión...

Cuando uno aprende a confiar en Dios en todos los aspectos de la vida, vive con gozo, con una paz que no se puede entender racionalmente y con esperanza. ¿Esperanza? Claro!! Cada día uno experimenta un milagro nuevo, el solo hecho de despertar es un milagro, el solo hecho de tener alimento, de tener vestido es un milagro. A veces yo me pregunto como la gente sana puede vivir mentalmente enferma, angustiada y sin esperanza, aún conociendo la Palabra de Dios y se preguntan entonces porqué pasan por dificultades. Pues obvio, Dios quiere enseñarles a vivir CONFIANDO en El. Cuando estas atrapado por los cuatro costados, cuando parece que te estás ahogando, lo único lógico sería levantar la cabeza hacia arriba no? Asimismo, en medio de las dificultades hay que levantar la mirada hacia Dios y cuando aprendemos a sostenernos en El, ninguna montaña es tan alta. Esa es la verdad de la fe y de la esperanza, que no son tuyas que no nacen de ti, sino del corazón de Dios.

Hay que vivir agradecidos a Dios, sea el tiempo que vivimos bueno o no, sea que tengamos abundancia o tengamos lo justo para vivir, porque la Palabra de Dios es fiel, Dios siempre cumple sus promesas, tenemos un Dios que nos ama mucho más de lo que podemos comprender y ese amor es incondicional.

Mi oración es que todos experimenten la gracia, el amor, la fidelidad y la Salvación que ha reservado especialmente para ti, nuestro Señor y Salvador, JESUCRISTO.